La primera vez que alguien de Costa Rica me contó la historia del nombre Usnavy, me pareció lo más gracioso que había oído en cuanto a nombres. Para los que no han oído, se dice que alguna vez, alguien vio a un barco de la marina estadounidense en las costas de Costa Rica y leyó en el barco “U.S. Navy” lo que le pareció un buen nombre para su hijo (o hija?) y le puso de nombre Usnavy, o Usnaví.
Luego me di cuenta que en muchos países existe la misma historia, se dice que alguien en las costas de Chile vio el barco, o que fue frente a las playas de Perú, o fue un nicaragüense quien lo vio, etc. Sin importar dónde se haya avistado el barco estadounidense la primera vez, la historia de Usnavy me parece muy divertida, original y a parte de seguramente ser cierta, dice mucho de la idiosincrasia del latinoamericano. Tan típico es este cuento, que todos nos queremos apropiar de él. Lo que comenzó como una ingenua mirada al barco gigante extranjero en las costas de algún país, terminó siendo un mito internacional. Pero no cabe duda que es de las mejores historias de nombres que he oído…
Una ventaja de llamarse Usnavy es que puedes encontrar cualquier tipo de mercancía personalizada con tu nombre.